El fin del soporte oficial para Windows 10 en octubre de 2025 marcará el fin de una era para millones de usuarios, lo que plantea la pregunta: ¿qué opciones tienen una vez que esto ocurra?
1. Actualización a Windows 11 o posterior
La opción más directa será actualizar a Windows 11, especialmente si tu hardware es compatible con los requisitos mínimos de esta versión. Windows 11 ofrece mejoras en seguridad, rendimiento, y ahora con IA avanzada en la versión 24H2. Sin embargo, esto implicaría que algunos usuarios necesitarán un equipo nuevo para cumplir con las exigencias técnicas.
2. Continuar usando Windows 10 sin soporte
Muchos usuarios optarán por seguir utilizando Windows 10 después del 2025. Sin embargo, esto es una opción arriesgada, ya que al no recibir actualizaciones de seguridad, los sistemas serán más vulnerables a ataques cibernéticos. Este es uno de los puntos más críticos señalados por expertos en seguridad como ZDNet.
3. Suscripción a actualizaciones de seguridad
Microsoft ha propuesto ofrecer un servicio de suscripción anual para seguir recibiendo actualizaciones de seguridad en Windows 10. Esta opción podría costar alrededor de 57 euros al año para los primeros usuarios, y aumentará a medida que pasen los años. Aunque puede parecer una solución intermedia, este costo adicional podría ser un obstáculo para muchos, especialmente considerando que a largo plazo la inversión puede ser considerable.
4. Migración a Linux
Para los usuarios que no quieren seguir invirtiendo en el ecosistema de Microsoft, la migración a Linux es una opción viable. Linux es un sistema operativo gratuito y de código abierto que ofrece una amplia variedad de distribuciones para diferentes necesidades. Las empresas y usuarios con más experiencia técnica están considerando esta opción para evitar costos adicionales, especialmente si no dependen del software exclusivo de Windows. Distribuciones como Ubuntu o Linux Mint son bastante amigables para usuarios que buscan una experiencia similar a la de Windows.
5. Comprar un nuevo equipo compatible con versiones futuras
Si tu ordenador no es compatible con Windows 11, la alternativa es invertir en hardware nuevo. Para aquellos que están dispuestos a hacer esta inversión, los nuevos equipos no solo soportarán Windows 11, sino también futuros desarrollos del sistema operativo que Microsoft lance.
Conclusión
La transición después del fin del soporte para Windows 10 representa un reto para millones de usuarios. La decisión final dependerá de factores como el presupuesto, la experiencia técnica, y la necesidad de continuar con un sistema operativo seguro y actualizado. Para algunos, actualizar a Windows 11 será el camino más lógico, mientras que otros podrían migrar a soluciones de código abierto como Linux o considerar la suscripción de seguridad de Microsoft.
Esta diversidad de opciones ofrece flexibilidad, pero también exige que los usuarios evalúen cuidadosamente sus necesidades y capacidades a largo plazo.