En 2024, la estabilidad del Raspberry Pi 4 sigue siendo sólida, con mejoras constantes gracias a actualizaciones de software y una comunidad activa que impulsa su rendimiento. Desde su lanzamiento en 2019, el Raspberry Pi 4 ha sido un dispositivo versátil, utilizado en proyectos de IoT, servidores domésticos, y como estación de trabajo ligera. Veamos los aspectos clave de su estabilidad en 2024:
Mejoras en el software y compatibilidad
La estabilidad del Raspberry Pi 4 ha mejorado significativamente gracias a la optimización del sistema operativo Raspberry Pi OS (anteriormente Raspbian), basado en Debian. Las actualizaciones periódicas han permitido optimizar el manejo de recursos, mejorar la seguridad y aumentar la compatibilidad con una mayor variedad de aplicaciones y periféricos. En 2024, las versiones más recientes de Raspberry Pi OS incluyen mejoras en la gestión térmica y en el rendimiento general, lo que se traduce en un uso más estable, incluso para tareas más intensivas.
Rendimiento térmico y estabilidad bajo carga
El Raspberry Pi 4, con su procesador de cuatro núcleos Cortex-A72, ha sido conocido por generar más calor que sus predecesores, especialmente en tareas que demandan más recursos. En 2024, el uso de soluciones de refrigeración pasiva o activa, como ventiladores y disipadores, sigue siendo esencial para mantener la estabilidad bajo carga intensa. Aunque el sistema es capaz de funcionar sin problemas para muchas aplicaciones cotidianas, aquellos que realizan tareas más exigentes, como la emulación de juegos o la transcodificación de videos, deben asegurarse de contar con una buena gestión térmica para evitar el throttling o reducción automática de velocidad para evitar sobrecalentamiento.
Capacidades de red y conectividad
El Raspberry Pi 4 cuenta con un puerto Gigabit Ethernet y soporte para Wi-Fi de doble banda (2.4 GHz y 5 GHz), lo que mejora su desempeño en aplicaciones de red y servidores. En 2024, estas características han demostrado ser estables para proyectos que involucran servidores web, aplicaciones IoT, o redes privadas virtuales (VPN). La estabilidad en este sentido ha permitido que el Raspberry Pi 4 sea una opción confiable para configuraciones de servidor pequeñas y medianas.
Usos en proyectos a largo plazo
La longevidad y estabilidad del Raspberry Pi 4 lo han convertido en una opción sólida para proyectos de larga duración, como estaciones meteorológicas, servidores de medios, y nodos de red. A lo largo de los años, la comunidad ha desarrollado numerosos tutoriales y scripts que mejoran el rendimiento y permiten que el dispositivo mantenga una estabilidad constante en aplicaciones que requieren uptime prolongado.
Conclusión
En 2024, el Raspberry Pi 4 sigue siendo una opción estable para una amplia gama de aplicaciones. Con las mejoras en software, una comunidad fuerte y diversas soluciones de hardware para mejorar la refrigeración, su estabilidad ha avanzado significativamente desde su lanzamiento, siendo una plataforma confiable tanto para aficionados como para profesionales.